Así no, señor presidente
El sistema de salud, destruido y abandonado por la clase política a la cual usted pertenece, debió dar respuesta a una pandemia que fue inesperada en el 2020. Se trató de emparchar para que funcionará de la mejor manera, pero a pesar de eso, seguimos con muchas falencias, porque no podemos corregir en pocos meses los desastres que se vienen haciendo de hace muchísimos años.
Insisto en que usted, señor presidente, pertenece a esa clase política que destruyó el sistema de salud.
Los profesionales de la salud dejamos todo. Tuvimos que enfrentar situaciones laborales extremas: nos contagiamos, nos enfermamos, y dejamos nuestras vidas atendiendo a la población.
No esperábamos de usted semejante cachetazo.
Usted afirma que “el sistema de salud se relajó”, sin embargo tiene que entender que el sistema de salud somos todos: no es una pared; no es un gerenciador; no es un respirador. Es un ser humano que trabaja todos los días en pos del bienestar del otro.
La salud es el bienestar íntegro de la persona, y así como tuvimos que atender la pandemia, muchos pacientes tuvieron que postergar sus cuidados y atenciones de otras patologías que no poseen vínculo con el COVID.
Quiero aclararle a usted que -si bien en algún momento bajó el número de casos- la pandemia nunca terminó: en los centros de salud jamás dejamos de atender casos de COVID-19, como así tampoco dejamos abandonados a esos pacientes con otras patologías que, de no haber sido atendidos (de haber estado nosotros relajados) hubieran llegado a perder su vida.
Señor presidente: creo que lo que ha dicho en el día de ayer es un maltrato innecesario para todo el equipo de salud, y en especial al sector médico al cual representó.
Espero de usted que recapacite; espero que reconozca que se equivocó, espero que los profesionales de la salud dejemos de recibir golpe sobre golpe, y que nos dejen de poner de rodillas.
Señor presidente, le solicito que con premura reivindique a todo el equipo de salud: nosotros nos enfermamos y nosotros nos morimos atendiendo a la gente; han quedado familias devastadas por la pérdida de cada profesional sanitario.
Escuchar que nuestro presidente maltrate a quién sostiene la vida de su población me causó mucho dolor. No merecemos estás expresiones suyas.
Le pido que reflexione, que al hablar mida sus palabras, para no recurrir a agresiones innecesarias que impacten en el corazón de todos los trabajadores de la salud.
Así no, señor presidente. Ningún general maltrata a su tropa cuando quiere ganar una guerra.
Sin otro particular, con el máximo de los respetos, lo saluda ATTE.
Dr. Jorge Mazzone
Presidente del Colegio de Médicos de la Provincia de Buenos Aires – Distrito I